La mariposa africana llegó a España hace tres décadas y desde entonces ha arrasado con los geranios ornamentales. Cómo evitar la mariposa del geranio es una pregunta que se hacen algunos jardineros y la respuesta no es sencilla. Pero la hay
Cuando la mariposa africana o Cacyreus marshalli ataca a un geranio, poco se puede hacer. Los hay que fumigan, que podan, que cuidan…, pero con pocos resultados. El riesgo a que esas polillas crezcan y vuelen a otra planta hace más aconsejable arrancar el geranio y tirarlo a la basura sin compostar. Muchos se preguntan cómo evitar la mariposa del geranio y buscan soluciones. Hay pocas, pero las hay.
Pero antes, un poco de historia. La mariposa del geranio se detectó por primera vez en España en 1987, en concreto en Mallorca. Originaria de África, donde tiene depredadores naturales que la mantienen a raya, se cree que vino importada desde Holanda, y que se desarrolló por el resto de España a través de un chito. Desde entonces, se ha convertido en un quebradero de cabeza para muchos jardineros, que ven cómo sus parterres se echan a perder en cuestión de días.
Cómo evitar la mariposa del geranio
Hay tres posibilidades para que los geranios se salven y sigan sanos.
1. Fumigar cada mes con un insecticida. No es una solución perfecta (el insecticida contribuye a arrasar con insectos beneficiosos que controlan otras plagas y se podría crear un problema mucho mayor). Tampoco se asegura que queden larvas resguardadas o que la plaga llegue en el momento en que nos descuidemos. Muchos usuarios recomiendan en este caso el insecticida llamado confidor. Está la opción ecológica, que nosotros siempre recomendamos, como piretrinas naturales y Bacillus thuringiensis, pero en el caso de esta plaga habría que fumigar constantemente.
2. Tapar con una malla. Otra opción poco realista. ¿De qué sirve tapar con malla una planta que tenemos, precisamente, porque queremos disfrutar de ella? Sería mejor en ese caso no optar por el geranio y disfrutar de flores de petunia, por ejemplo.
3. Elegir variedades de geranio que repelen a la mariposa. Esta es la solución que coincide con la filosofía de El Buen Jardinero. La mariposa africana ataca, sobre todo, al geranio zonal (Pelargonium zonale) y gitanilla (Pelargonium peltatum). Pero evita el geranio de pensamiento (Pelargonium grandiflorum) y el aromático (Pelagronium graveolens, capitatum, cripum). Aquí van dos fotografías para aprender a conocerlas:
Geranio de pensamiento o Pelargonium grandiflorum (sus flores recuerdan a la del pensamiento)
Geranio aromático (sus hojas son más dentadas y la flor un poco más pequeña)
¿Por qué la mariposa africana ataca a unos geranios pero se aleja de otros?
La explicación está en el aroma de las hojas. El geranio zonal, el que hemos visto de toda la vida en los balcones, tiene un olor muy caracterísitco. Además, el método de cultivo en invernadero hace que tenga unos brotes muy verdes y grandes, lo que aumenta la concentración de ese olor que atrae a la mariposa. Por eso, este insecto suele acudir con más frecuencia a los geranios que han sido plantados recientemente que a los que llevan años en un parterre.
Lo idel sería comprar en el vivero o la floristería geranios de pensamiento o de la variedad aromática. Y aquí entra en juego el marketing: no son tan vistosos en macetita como el zonal o el gitanilla. Y algunos establecimientos prefieren vender geranios vistosos, aunque atraigan a la mariposa. El jardinero tendrá que buscar el establecimiento que venda esa variedad resistente. Es la respuesta más eficaz a cómo evitar la mariposa del geranio, porque no necesitaremos insecticidas ni tapar con malla.