La verónica, o hebe, es una planta de floración tardía que gusta por el colorido que regala en los meses otoñales. No es fácil de cultivar en maceta porque no soporta las heladas ni el sol muy fuerte, pero con algunos cuidados se puede disfrutar todo el año. Con esta guía podemos aprender a cultivarla y saber, por ejemplo, por qué se concontramos hojas marrones en la verónica hebe
Al igual que sucede con la erica, la verónica es una planta que atrae por su floración tardía, y que llena de color las floristerías y viveros. No es una planta fácil de cultivar en un balcón o terraza, porque requiere semisombra, no soporta el sol fuerte y muere cuando las temperaturas bajan de los 10 grados. Pero, si nos gusta esta planta, podemos cultivarla siguiendo unos pocos consejos. Así, podremos saber por qué encontramos hojas marrones en la verónica hebe.
¿Puedo situar la verónica hebe a pleno sol?
En un verano duro como el mediterráneo, la verónica hebe no puede estar a pleno sol. Lo mejor es tenerla a semisombra: con un poco de sol a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde. Tampoco acepta estar totalmente a la sombra, porque necesita del sol para su floración.
¿Por qué hay hojas marrones en la verónica hebe?
La verónica es una planta sensible al frío cuyas hojas se suelen tornar de color marrón con las bajas temperaturas. Cuando llegan los primeros fríos, a finales de octubre o principios de noviembre, es buena idea situarla dentro de casa, en una habitación fría y bien aireada. Los riegos tendrán que ser entonces más espaciados (una vez a la semana).
¿Cuánto debe regarse la verónica hebe?
Es una planta que requiere sustrato húmedo pero que reacciona muy negativamente a los encharcamientos. La maceta debe tener un buen sistema de drenaje y hay que tener cuidado de que el agua no se quede acumulada en su parte inferior.
¿Qué plagas sufre la verónica hebe?
Una de las plagas más comunes de la verónica es la cochinilla algodonsa. Se trata de un insecto blanco, grande, que parece una mota de algodón y que es complicado de tratar, porque suele resurgir periódicamente. Lo mejor es quitarlo uno a uno con un cepillo de dientes o un algodón empapados en alcohol. Para saber cómo responder ante la cochinilla algodonosa, puedes consultar nuestra guía.